jueves, 19 de marzo de 2009

a Carlos, que está para comérselo

Esos labios que saben a despedida,
a vinagre en las heridas,
a pañuelo de estación.

J. Sabina

Las despedidas tienen sabor a:
  • lomo embuchado, del tiernecito, con un hilo de esperanza de aceite de oliva
  • mesa redonda de quesos variados, generalmente semicurados o blandos, malolientes.
  • estoladelchino
  • tender de leche, para empalagar aún más
  • brazo de gitano, ese chute de azúcar indispensable por la mañana
  • café con leche, sin azúcar please, que ej que no tenemo'

Las despedidas suenan a:
  • voz flamenca de anita y palmas de alegría
  • lavadoras que ruedan en sentido antihorario
  • you know i'm not good de amy (chicos, Max está durmiendo coño!)
  • timbres, aspiradoras, agua de grifo, estas teclas ligeras
  • acento inglés
  • radio, lapiz dibujando estrellas, piticlis y peces

Las despedidas se visten de:
  • pijama, para bajar a por tabaco
  • liotardos, recién estrenados
  • tobilleras, negras como las medias
  • vaqueros, 'cause italian style rules

Todo esto se traduce en que nos pondremos una máscara sacada de cajas de cartón de pañales para que no nos vean llorar. Y pisaremos el mundo más fuerte, para no oír el sonido de cada lágrima mientras cae por el hueco de la escalera.

No hay comentarios: